domingo, diciembre 28, 2014

Arquitectura Peruana: Resumen del 2014. Israel Romero Alamo.

Por Israel Romero Alamo*

El año 2014, para la arquitectura peruana, se ha mostrado como uno de los más relevantes de la última década en cuanto a producción proyectual, teórica y crítica se refiere. La reaparición de los “concursos”, el reconocimiento internacional de algunas obras nacionales o la publicación de más de una decena de libros, indican desde ya algo positivo; al menos en cantidad.

Sin embargo, ¿hacia dónde se han orientado todos estos productos? ¿Ha existido un cambio de rumbo, solo un aumento de la productividad ‘nacional’ o una mejora mayúscula?

Exposiciones y publicaciones

El 2014 contaría con exposiciones importantes y con un grado de organización generalizado que podría servir de soporte para hechos posteriores de igual magnitud. Se cumplirían 100 años del nacimiento de Luis Miró Quesada Garland y por dicho motivo se organizarían exposiciones y conversatorios que —por la magnitud del tema— reunirían a teóricos y críticos de arquitectura como Wiley Ludeña, Augusto Ortiz de Zevallos, Adolfo Córdova, Elio Martuccelli, Frederick Cooper, José Beingolea, Pedro Belaúnde, entre otros, para discutir la importancia de LMQG para la historia de la arquitectura en el Perú. Esta exposición, la más importante del 2014 y organizada por la FAUA UNI, tendría pensado movilizarse a otros centros de estudios y descentralizarse hacia otras ciudades del país. Se promete la de Seoane para el próximo año, quien también cumple un siglo.
Previo y después de ello se organizarían —entre otras— las exposiciones Retóricas de la Línea. Gráfica Arquitectónica en el Perú durante el siglo XX y AOT Historia de un Emprendimiento, la primera organizada por Docomomo y la segunda por la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Lima. Dos muestras expuestas con rigurosidad y exactitud bajo los objetivos individualmente planteados.
Estas tres exposiciones estarían orientadas —probablemente sin quererlo como objetivo común— hacia la misma temática: la arquitectura moderna, develando un interés más o menos general por ‘recuperar’ o traer al presente lo sucedido el siglo pasado.
Sería precisamente la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Lima la que empezaría el año con la presentación de una publicación (y exposición incluida) que tendría implícitamente la misma finalidad. Recuperar parte del pasado de la arquitectura del Perú. La facultad que dirige Enrique Bonilla, junto a la editorial de la Universidad, presentaría su primer libro: Héctor Velarde. Arquitecto y Humanista.
Apoyando esto, que casualidad no es, podría verse que las facultades de Arquitectura del país serían las encargadas, casi en la totalidad del asunto, de publicar y difundir los libros y textos de arquitectura del año que se va.
Así, continuando con la temática de reverberar el pasado, el Instituto de Investigación de la FAUA-UNI reeditaría el libro de José Bentín: Enrique Seoane Ros. Una búsqueda de raíces peruanas con un cambio de formato y un soporte institucional que lo haría más accesible que la versión de 1989. Luego, José Bentín, con la UPC, publicaría un libro casi autobiográfico: Crónicas en la ruta de la Arquitectura.
Bajo la misma perspectiva que el libro acerca de Seoane, la Editorial de la FAUA-UNI, dirigida por Wiley Ludeña, publicaría el libro Fernando Belaúnde Terry y El ideario Moderno. Arquitectura y Urbanismo en el Perú entre 1936-1969, escrito por José Carlos Huapaya. Este libro se sumaría a la publicación de los primeros números de las tres revistas del Posgrado de la Facultad de Arquitectura de la UNI: EST, Devenir y WASI, revistas dirigidas por Virginia Marzal, José Hayakawa y Adolfo Córdova, respectivamente. Revistas —también editadas en conjunto por Wiley Ludeña y Ana Cuba— de las que se espera puedan mantenerse y continuar; teniendo en cuenta que esto es algo difícil de lograr en un contexto como el peruano, donde el publicar (leer y escribir) arquitectura no es entendido como algo prioritario.
Sería Wiley Ludeña quien sumaría más libros al 2014. Publicaría en noviembre —esta vez con la Pontificia Universidad Católica del Perú— la edición facsimilar de los “Clásicos Peruanos. Arquitectura y Pensamiento”: Lecciones de Arquitectura (Teodoro Elmore), Lo Bello en el Arte (Alejandro Deustua), Nociones y Elementos de Arquitectura (Héctor Velarde) y Espacio en el Tiempo (Luis Miró Quesada). Cuatro libros necesarios para entender la arquitectura en el Perú de primera mitad de siglo XX. Con estos cuatro libros —junto a los de la Universidad de Lima y la UNI—, el 2014 se convertiría en el año para rememorar el aporte teórico y proyectual de la arquitectura del Perú aristocrático y del Movimiento Moderno europeo aterrizado en el Perú de los mil novecientos. Según dicen los entendidos, lo mejor que ha tenido la arquitectura del Perú en toda su historia libre e independiente…
Para engrosar la biblioteca, el mes de julio nos traería un libro no menos importante: Todavía la Arquitectura, primer libro de Enrique Ciriani publicado en el Perú y primer libro también de la Editorial Arcadia (primera y necesaria editorial de arquitectura del país). Un libro que —sin pretenderlo— se mueve detrás de la misma visión de las publicaciones acerca de Luis Miró Quesada o Fernando Belaúnde.
Como se ve, las publicaciones de la Arquitectura Moderna serían las predominantes en el 2014 a excepción de la publicación de la Universidad Continental (Huancayo). Esta publicaría Modernidad y Tradición en la Arquitectura del Mantaro (Jorge Burga, César Moncloa, Manuel Perales, Josué Sánchez, Juan Tokeshi), sería un libro ejemplar y actual que se haría acreedor del premio a Investigación, Teoría y Crítica en la XVI Bienal de Arquitectura Peruana. Completamente merecido.

Bienales y obra construida

El tema de las Bienales en el 2014 se manejaría, en el país, ‘sobre la marcha’. Tanto en la auspiciosa participación peruana en la Bienal de Venecia, como en la local (la XVI BAP). Bajo una evidente falta de interés de ‘todos’ los arquitectos peruanos, ambas bienales servirían para asentar más lo ya establecido. La capacidad monotemática y unidireccional de un sector de arquitectos interesados en el tema; convirtiendo ambas bienales, para el común del gremio arquitectónico, en algo anecdótico.
La primera estaría dirigida por Sharif Kahatt y José Orrego, y la segunda por Enrique Bonilla. En la participación peruana en la XIV Bienal de Venecia, se regresaría a mediados de siglo XX (como en el caso de las exposiciones y publicaciones vistas anteriormente) para revivir y contraponer la arquitectura ‘formal’ e ‘informal’ de la época con la muestra de nombre In/Formal. En el segundo, el lema sería: “Arquitectura Peruana en el desarrollo Nacional”, frase que muy poco tendría que ver con los resultados obtenidos.
En el tema de las bienales, llama la atención las obras peruanas reconocidas en la IX BIAU de Rosario (Argentina) y en la XIX BAQ (Ecuador): el Colegio Santa Elena de Piedritas (Elizabeth Añaños y Carlos Restrepo) y la Escuela de Chuquibambilla (Paulo Afonso, Marta Maccaglia, Ignacio Bosch, Borja Bosch) respectivamente. Obras acorde a la temática latinoamericana actual pero que no lograron alcanzar algún tipo de ‘reconocimiento’ en la XVI BAP (Perú), evidenciando lo poco atinado del evento local, desde su organización hasta los criterios para establecer patrones de selección. Mientras que en Latinoamérica —en general, y no es coincidencia— la mirada se ha vuelto hacia un campo alternativo y casi periférico, en el Perú se sigue observando románticamente casas de playas u obras que se les parecen.
Por ello es que no resulta gratuita la aparición de una ‘bienal alternativa’ plagada de dura y a veces incomprensible crítica, creada por la página anónima de Facebook: Grandes éxitos de la Arquitectura Peruana, logrando opacar en gran manera incluso a la ‘Bienal Oficial’, llevando a indicar reiteradas veces, durante la mitad del año, el elitismo, la segregación y la superficialidad de la arquitectura oficial del Perú. Bajo sus limitaciones, un reclamo completamente válido si ponemos a “la arquitectura del Perú” al costado de nuestros vecinos latinoamericanos.
Las obras mencionadas anteriormente: el Colegio Santa Elena de Piedritas (Piura) y la Escuela de Chuquibambilla (Apurímac) serían las obras paradigmáticas de la arquitectura peruana del 2014. Por encima del actual Hexágono de Oro 2014, el Lugar de la Memoria. Los centros educativos mencionados encarnan (y hablan de) la urgente necesidad de descentralización geográfica, social y temática frente a las reincidentes obras arquitectónicas de la última década. Son obras sencillas y sin discursos forzados. Casi sin discursos. De dirección prioritariamente utilitaria, necesaria y austera. Sin nombres, sin recetas. Una representación de una búsqueda más acorde a un país hastiado de la inoperancia de obras pretenciosas que actúan en nombre de la pura arquitectura. 
Resulta importante, además, bajo esta misma línea, resaltar la obra hecha por el Programa BarrioMío (Recuperación de Espacios Públicos) con la Municipalidad de Lima en las periferias de la capital. Las intervenciones realizadas en parques y vías públicas irían a la par del pensamiento que compartiría Javier Vera (ex CITIO). Una obra, de la misma manera, sin mayores pretensiones que su fin práctico.
El PLAM 2035, también en la capital peruana y dirigido por José García Calderón, iría a la par de lo gestado en BarrioMío. Un amplio y joven grupo buscaría y consolidaría, quizá sin mayor experiencia, hacer por su ciudad algo que estaba pendiente desde bastante tiempo atrás. Un ejemplo completamente replicable en cuanto a su finalidad y a su organización por un fin común, del que se espera —a pesar del cambio de gestión municipal— pueda continuar. 

Concursos y medios digitales

Los ‘concursos’ habrían sido en el 2014 el hecho más polémico por el que habrían pasado los arquitectos del país. Al menos por un buen número de semanas —y a través de una computadora— a fines de la primera mitad del año. 
La polémica se habría desatado por la restricción a la participación de arquitectos jóvenes y a la ausencia de una retribución económica. La discusión, con dardos a favor y en contra, encontró en Facebook una plataforma que —debido a su magnitud— logró sobrepasar los límites de la burbuja arquitectónica; llevándose a algunos diarios de circulación nacional y por otro lado a páginas de arquitectura fuera del país. Pero nada más.
Sería una buena intención de varias decenas de jóvenes arquitectos que quedó absolutamente en nada. Se vio opacada por la flojera que da cuando algo del Facebook debe llevarse a ‘la realidad’ y por la participación de otro grupo (no menos importante) de arquitectos. Tres concursos: el Museo Nacional, el Centro de Investigación en Machu Picchu, y el Archivo General de la Nación que fueron desarrollados bajo premisas cuestionables pero que consiguieron su fin aliando al oficialismo gubernamental con la esquizofrenia, la desorganización y la falta de comunicación alturada de los arquitectos, en donde el propio Colegio de Arquitectos del Perú se situaría en una posición coyuntural no menos complicada.
Gracias a ello, y sumando desorganizaciones y tropiezos consecutivos, El Colegio de Arquitectos del Perú, se consolidaría, en el 2014, como ‘el enemigo’ de un buen número de arquitectos. Un silencio a voces. Esto se agudizaría más con la creación mancomunada de un grupo de arquitectos que se autodenominarían como la Asociación Peruana de Estudios de Arquitectura. Asociación que, hasta la actualidad, muy pocos entenderíamos, especulándose incluso en los medios digitales acerca de su constitución.
Serían precisamente las plataformas digitales, y su facilidad, las que —legítimamente acorde a la época— servirían de medios de comunicación e intercambio de ideas o crítica de arquitectura. La página Bitácora Arquitectura Peruana se mantendría como el principal medio de difusión nacional. Por otro lado se doblegaría, con respecto al año pasado, el número de blogs o páginas en redes sociales que hablarían, según temáticas diferentes, de la arquitectura del Perú.
Esto no es menos importante frente a lo que muchos puedan pensar. Es decir, en un país deliberadamente centralizado y limeñizado como el Perú, las redes sociales y los medios digitales son los que intentan romper el monopolio que por décadas parecía inquebrantable…
Aunque quedaría pendiente para los años venideros que lo que se gesta en una plataforma digital pueda ser llevado más allá, a la calles o a las facultades. Donde los reclamos puedan hacerse oficiales y donde los aludidos no puedan hacerse los de la vista gorda.

Ausencias

A contraposición de lo anterior, llama la atención la reincidencia en la desaparición de algunos eventos que en años anteriores tenían vital importancia en la difusión de la arquitectura peruana. Estamos hablando de los Congresos Nacionales de Estudiantes de Arquitectura —siendo este el tercer año consecutivo en el que no se desarrolla—, o la ausencia de los eventos organizados desde más de media década por Espacio 24, que en el presente año no tuvo aparición alguna. Son eventos que por el bien de la discusión, la reflexión y la difusión de arquitectura deberían volver —con las revisiones respectivas— en el 2015 y mantenerse.
No puede hacerse un recuento de lo sucedido en la arquitectura del Perú en el presente año sin mencionar la lamentable desaparición de los arquitectos Miguel Ángel Llona, Juan Tokeshi y Miguel Rodrigo Mazuré. Sin duda, grandes pérdidas para la arquitectura nacional a quienes, siendo conscientes de su importancia proyectual y/o teórica, poco homenaje en vida se les hizo.

Conclusión

Es innegable el crecimiento sustancial de los productos arquitectónicos en el 2014, Sin embargo, no resulta menor que las obras arquitectónicas paradigmáticas hechas en el Perú hayan sido resaltadas fuera del país y no al interior. Esto puede mostrar las perspectivas y los enfoques distintos de los centros de formación y de difusión arquitectónica (concentrados en la capital), a los que les cuesta mirar más allá de sus fronteras. Y de la misma forma, la ausencia —o aislamiento, en todo caso— de medios o centros regionales que permitan una lectura holística de lo que sucede en el territorio nacional.
A pesar de que el 2014 resalta por el amplio número de publicaciones de arquitectura —asumiendo esto un interés ligeramente mayor por la investigación o la teoría—, no deja de sorprender la poca convocatoria que esto genera. Aun con todo esto, es claro el interés por recuperar textos “clásicos” o de arquitectos “históricos”, pues ha sido la constante en este año, y eso da cuenta de la inclinación por elaborar o armar una base referencial de “lo que se hizo”, para de ahí partir al futuro. Es un fin válido y coherente  viniendo de centros universitarios. 
Sin embargo, libros como los de Héctor Velarde o Luis Miró Quesada, más de ser una base en la que apoyarse para armar la arquitectura del presente y del futuro próximo, debería ser un pasado traído al presente para ser superado como la representación de una época completamente distinta a la actual. Como algo que incluso ya no hay que repetir. Hay que entender que es otra la mirada que se erige en el contexto latinoamericano actual como sociedad comunal, y que esta es distante al Perú de los 40’s o de los 50’s, de donde son los textos que se han vuelto a publicar.
Esta mirada acorde a lo latinoamericano puede notarse en el Colegio Santa Elena de Piedritas o la Escuela de Chuquibambilla, pues apelan con conciencia a su situación periférica y a la descentralización. Descentralización que yace pendiente en la arquitectura del país, desde siempre. No solo de manera geográfica, sino también socialmente. Si se quiere hablar de arquitectura en el Perú hay que empezar por dejar de mirar con nostalgia libros u obras del pasado. No vamos a encontrar, en la mayoría de los libros u obras ‘recuperadas’, el reflejo de un Perú común, sino todo lo contrario. 
Es notable el interés de algunos arquitectos por aliarse con el Estado para conseguir Bienales y Concursos. De hecho, es un paso mayor frente a una profesión que casi desde la época de Belaúnde se había mantenido solitaria y mirándose —casi por obligación— a sí misma. Habría que aclarar bajo qué términos, pues, lo que poco se ha dado, ha sido la comunicación entre arquitectos. Es decir, más allá de las conversaciones de amigos en algún cocktail.
Queda pendiente el dejar de mirar Lima y el centralismo —además— al interior de la propia Lima. Y para ello, Modernidad y Tradición en la Arquitectura del Mantaro o las obras como el colegio Santa Elena o el Programa BarrioMío resultan ser buenos ejemplos completamente factibles de replicar en favor de algo sistémico.
El 2014 ha sido, para la arquitectura en el Perú, un año movido, de ‘buenas intenciones’ y de una producción más o menos amplia. Desde los reclamos colectivos vía Internet hasta la nutrida publicación de libros de arquitectura. Sin embargo, todo esto se ha dado de manera mecánica, dispersa y discorde, sin encontrar un buen puerto al que llegar o una reflexión final y mayor que permita dar un siguiente paso. 
Y esto porque se parte de las esperanzas puestas en la ceguera voluntaria, el ombliguismo y la selección temática light de varias Facultades de Arquitectura que obvian de su repertorio el mirar críticamente al boom inmobiliario, al boom del retail, al oficialismo en general, o una apertura frente a las demás, teniendo —como ya se ha visto— el espacio y los medios para hacer lo contrario. 
Se hace necesario buscar una alternativa. Y no es fácil. De hecho, es el recorrido circular que en este año hemos vuelto a recorrer, aunque en esta oportunidad haya existido mayor producción que en las anteriores, con algunas de cal y otras de arena.

*Arquitecto, Director de la Revista La Chimenea

sábado, noviembre 22, 2014

Edificios Híbridos en Lima. Estrategias proyectuales para edificios públicos en altura. Sharif Kahatt Marta Morelli Taller Urban Lima. Presentación del libro.

Los arquitectos Sharif Kahatt y Marta Morelli de la oficina K+M Arquitectura y Urbanismo junto a los estudiantes del Taller Urban Lima de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la PUCP han publicado el libro "Edificios Híbridos en Lima. Estrategias proyectuales para edificios públicos en altura." 

El libro aporta reflexiones sobre una nueva aproximación al edificio público en Lima que responda a la necesidad de proveer espacios públicos y construir urbanidad a través de la Arquitectura. Las investigaciones y los proyectos publicados fueron producidos durante los semestres 2011 y 2012.

Las propuestas de arquitectura y proyectos urbanos que se presentan buscan la superposición de espacios para actividades colectivas, mediante estrategias proyectuales que promueven el desarrollo educacional y técnico, junto con la cohesión social que Lima necesita. 

Se muestran estudios y exploraciones arquitectónicas de nuevos escenarios urbanos para edificios públicos híbridos en altura. Las propuestas se ubican en los barrios y zonas comerciales más densas, demandadas, y con mayor dinamismo metropolitano de Lima: Gamarra, Mesa Redonda y el Centro Histórico. Estas arquitecturas proponen nuevas tipologías edificatorias y espaciales para el desarrollo urbano y social.

La presentación del libro se realizará el 4 de diciembre en la FAU PUCP con la participación de los arquitectos Frederick Cooper, Mariana Leguía y Reynaldo Ledgard.

Fecha
Jueves 4 de diciembre de 2014
Horario
6:30 p.m.
Lugar
Aula 103, Facultad de Arquitectura y Urbanismo PUCP. Avenida La Marina 1801, San Miguel, Lima.
Ingreso libre.

viernes, noviembre 14, 2014

BIAU 2014: Una arquitectura joven pero madura. Humberto Viccina.

Por Humberto Viccina*

La IX Bienal Iberoamericana de Arquitectura y Urbanismo 2014 realizada en Rosario nos mostró una visión panorámica veloz e intensa de la producción arquitectónica actual en esta zona del mundo. Reunidos al borde del río Paraná, los premiados, disertantes, conferencistas, invitados y asistentes a este evento pudieron apreciar cómo en los últimos años la cara de Iberoamérica ha rejuvenecido, tal vez por la presencia de esos nuevos y entusiastas jóvenes arquitectos que en su mayor parte procedían de países latinoamericanos y fueron premiados o invitados a este evento para que muestren y expliquen sus obras, o el modo en que la pasión por la arquitectura les ha llevado a buscar mejorar el espacio para que vivan mejor las personas.

Entre los premiados se notaba la voluntad de renovar los viejos conceptos de la arquitectura erudita moderna buscando experimentar con formas nuevas de construcción y todo tipo de materiales y presupuestos. Con un cariz de bienal más latino… que iberoamericana, sin despreciar las exposiciones de los participantes europeos, este evento refleja que en la América mestiza e inmigrante del siglo 21 las manifestaciones arquitectónicas han tomado una gran madurez y autonomía hasta para poder afirmar que será – incluso ya lo es - uno de los grandes polos de interés de la arquitectura contemporánea.

De las obras premiadas resultan sobresalientes aquellas más ligadas al interés social o cultural sin ser mejores que las otras de tipo habitacional. Los equipamientos urbanos parecen ser claves para el desarrollo social y es también un campo de investigación proyectual que tiene hoy en muchos lugares resultados sorprendentes. Si intentamos hacer una selección para aprender un poco sobre cómo hacer arquitectura en Latinoamérica tendríamos que hablar necesariamente de la Plaza de las Artes en Sao Paulo, de Brasil Arquitetura; el Centro de Desarrollo Infantil El Guadual en el departamento del Cauca, de Feldman y Quiñonez; el jardín infantil Santo Domingo Savio en Medellín, de PLAN B arquitectos; la Biblioteca Casa de las Ideas en Tijuana, de CRO Estudio y el colegio Santa Elena de Piedritas en Talara, de Añaños y Restrepo.

Esta selección subjetiva y radical, 5 sobre 30 obras premiadas, resulta sin embargo atractiva porque se trata de proyectos absolutamente desligados de alguna influencia internacional, son proyectos pensados desde el lugar, las posibilidades económicas y constructivas, la vocación social y cultural del espacio de uso público; así como la búsqueda de soluciones espaciales y formales auténticas y originales que generan identidad. Son obras únicas e incomparables, irrepetibles en su concreción final pero ejemplares cómo manifestación de una actitud proyectual que se presenta rejuvenecida.

La Plaza de las Artes es una operación de sutura urbana que convierte un solar irregular en referencia espacial pública de una zona del centro de Sao Paulo. Es un edificio y no lo es, más bien podría ser más plaza que edificio porque todo lo construido y lo rescatado está subordinado al uso de una plaza que los reúne y organiza, los conecta y hace compañía al flujo de la gente. Tal vez por eso tiene un solo lenguaje formal, el del concreto armado visto, y un solo tipo de ventana más bien pequeña y ubicada de manera irregular que da énfasis al carácter sobrio y masivo, tal vez parco, de los volúmenes de los edificios que hacen de telón de fondo para la representación escénica de la vida.

En El Guadual, los espacios y las formas están íntimamente ligados a la construcción y los materiales. Diseñado en un ámbito participativo, las estructuras que combinan el concreto, el bambú, la caña y el metal forman un gran espacio central hacia donde se expanden las actividades con los niños. Es un espacio alegre donde los materiales vistos componen una atmósfera de
informalidad que vuelve lúdico el uso del espacio y relacionan la arquitectura con la geografía y el clima tropical de la zona.

Por otro lado, un proyecto similar en la ciudad de Medellín aborda el problema de otra manera. El Jardín Infantil en el Barrio de Santo Domingo Savio recurre a la fragmentación para adaptar la arquitectura al terreno en pendiente, pero también eso es útil para adaptar el nuevo edificio al contexto residencial, ladera llena de casas autoconstruidas e incompletas que brindan también un paisaje fragmentado e informal. Sin embargo, se evita la mímesis total pintando los bloques del Jardín con tonos verde y azul para contrastar así con el color ladrillo visto que tienen la mayor parte de las casas aledañas.

La Biblioteca Casa de las Ideas, en un barrio informal de Tijuana, también quiere contribuir a elevar la calidad de vida y la seguridad en la zona. Estrategia ya utilizada en otras ciudades críticas, la Biblioteca constituye un hito de cultura y recreación que ha sido tomada como propia por los vecinos; de esa manera las relaciones sociales se hacen más fluidas y los agentes agresores disminuyen. Siendo un edificio de volumetría cerrada, es sin embargo un elemento fundamental de referencia y sus características formales facilitan algunos usos externos como el del anfiteatro al aire libre de uno de sus lados.

Finalmente, en el Colegio Santa Elena de Piedritas toma importancia la necesidad de potenciar una zona precaria y responder con certeza a las necesidades de espacio y al clima caluroso de esta zona del norte del Perú. Como si fuera poco, también el proyecto enfrenta bien el desafío de una construcción económica, con pocos recursos y con materiales de la zona. De esta manera ladrillo visto, concreto, metal reciclado, caña brava y madera son los elementos materiales que enlazan nuevamente la arquitectura con el desierto y hacen de esta intervención un elemento que marca una nueva manera de entender la construcción para los habitantes de este caserío cercano a Talara.

De todos estos proyectos que lucen la vitalidad que encarnan sus autores podemos entonces extraer la lección común de la autenticidad. Se trata de arquitecturas sinceras, propias, genuinas, únicas, honestas, realizadas para resolver un espacio local pero con grandes lecciones para la arquitectura global, tan repetitiva y acuñada de firmas frías de arquitectos famosos o de despilfarro y ostentación empresarial y anónima. Son lecciones de trabajo arquitectónico que nos presenta las múltiples posibilidades que tenemos de inventar arquitectura para mejorar el ámbito del hombre, así como la necesidad de trabajar con los usuarios, los promotores y gestores de la sociedad para hacer proyectos más coherentes que resuelvan problemas y no se ocupen por ningún motivo de la imagen profesional o artística de sus arquitectos.

Praca das Artes. Brasil Arquitetura
Centro de Desarrollo Infantil El Guadual. Feldman - Quiñonez

Jardín Infantil Santo Domingo Savio. Plan B Arquitectos

Biblioteca Casa de las Ideas. CRO Estudio

Colegio Santa Elena de Piedritas. Añaños - Restrepo

*Humberto Viccina es arquitecto por la Universidad Nacional de Ingeniería. Máster en Arquitectura con mención en Historia, Teoría y Crítica por la Universidad Nacional de Ingeniería. Bachiller en Teología por la Pontificia Universidad de la Santa Cruz, Roma. Es docente en la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Piura, UDEP.

jueves, octubre 16, 2014

Historia de un Emprendimiento: Arana, Orrego y Torres AOT. Exposición, Muestra y Conferencia. Carrera de Arquitectura Universidad de Lima.

Anualmente la Carrera de Arquitectura de la Universidad de Lima realiza una investigación, una muestra y una conferencia sobre la obra de un arquitecto u oficina peruana. Dió inicio con el arquitecto Héctor Velarde en el 2012 y siguió con Walter Weberhofer en el 2013, este año decidieron revisar la obra de la oficina Arana - Orrego - Torres.

AOT significa más que unas siglas para la arquitectura peruana contemporánea. AOT fue durante más de cuarenta años probablemente la más organizada oficina de arquitectos que tuvo el Perú, la cual realizó obras de singular importancia, como el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, el edificio para la Química Suiza, la sede de IBM, entre otros importantes edificios.

En 1958 se asocian tres arquitectos: Carlos Arana, Antenor Orrego y Juan Torres, y forman una oficina de diseño arquitectónico, urbanismo, construcción e inspección de obra, conocida hoy como AOT. El Club Grau de Piura es la primera obra de esta asociación y fue obtenida por concurso público. Las grandes obras de AOT fueron ganadas bajo esta modalidad, y el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez fue la más importante de ellas.

Luego de 40 años de asociación, lentamente se va terminando y hoy en día la oficina ya no sigue desarrollando proyectos. Los documentos de arquitectura, planos, perspectivas, fotografías, recortes de diarios y diplomas se encuentran en 2 archivos que se pudieron consultar: el archivo de Antenor Orrego y el archivo de la familia Torres. El acceso a esos documentos permite la exposición, junto a documentos originales y facsimilares.

La exposición sobre AOT tiene 5 ejes temáticos: tiempo, obras, concursos, gestión y viajes. Con esta estructura se pretende, además de mostrar la producción de la oficina en el tiempo, narrar las otras caras de una oficina de arquitectura: los concursos no construidos, los viajes de estudio realizados y el día a día de la profesión. 

El equipo de investigación estuvo conformado por Michelle Llona Ridoutt, Fernando Mosquera D’onofrio, Tamara Corrales y Eduardo Ramírez y la Curaduría y montaje a cargo de la Oficina de Proyectos y Eventos Académicos de la Carrera de Arquitectura de la Universidad de Lima. 

Datos importantes

Exposición
Del 17 de octubre al 13 de noviembre
Inauguración
Fecha
Viernes 17 de octubre
Hora
1:00 p.m.
Lugar
Hall Edificio Q, Universidad de Lima.

Conferencia y Mesa Redonda
Michelle Llona, Fernando Mosquera. Elio Martucelli y Sharif S. Kahatt
Fecha
Lunes 20 de octubre
Hora
7:00 p.m. a 10:00 p.m.
Lugar
Auditorio Edificio W, Universidad de Lima, Av. Javier Prado Este, cuadra 46 s/n Monterrico, Santiago de Surco.

Más información
Página web Universidad de Lima 
Correo electrónico eventosarquitectura@ulima.edu.pe 


domingo, octubre 12, 2014

Enrique Seoane Ros. Una búsqueda de raíces peruanas. José Bentín Diez Canseco. Presentación de la segunda edición del libro.


En 1989 el arquitecto José Bentín Diez Canseco publicó el libro "Enrique Seoane Ros. Una búsqueda de raíces peruanas" el referente más importante sobre la obra de Seoane y su aporte a la arquitectura moderna peruana. El libro obtuvo una mención honrosa en la Bienal de Arquitectura de Quito en 1990.  

Después de 25 años se publica una segunda edición que será presentada por el arquitecto Bentín con los comentarios de los arquitectos José García Bryce y Luis Solari Lazarte.

Datos importantes

Presentación del libro "Enrique Seoane Ros. Una búsqueda de raíces peruanas."
Fecha
Miércoles 15 de octubre de 2014.
Hora
11:00 a.m.
Lugar
Auditorio FAUA UNI. Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Artes de la Universidad Nacional de Ingeniería. Avenida Túpac Amaru 210, Rímac, Lima.
Ingreso
Libre




miércoles, octubre 08, 2014

2° Concurso de Diseño de Sillas Na Lakalú Costa Rica. Silla Indira. Arturo Loro Lezama.

Na Lakalú Muebles de Diseño, es una empresa costarricense con 50 años de experiencia en la fabricación y diseño de productos de madera con materia prima de especies reforestables amigables con el ambiente. Este 2014 en el marco del IV Festival Internacional de Diseño (FID) convocó a su 2° Concurso de Diseño de Sillas el cual ha sido ganado por Arturo Loro Lezama, egresado de la Facultad de Arquitectura y Diseño de la Universidad Privada del Norte de Trujillo.

El concurso proponía el diseño de una silla que se destaque por su innovación, desde la propuesta conceptual, funcional, los materiales, la fabricación y nuevos modos de uso. Arturo Loro, propuso "Indira" una silla de madera que puede ser utilizada en conjunto o individualmente, teniendo un lenguaje formal similar en los elementos que la componen y busca integrarlos como diseño. El concepto es el desarrollo de un módulo “Indira” que pueda ser utilizado para distintos fines y que sea parte de un mismo formato y pueda ser reconocible en cada uno de los elementos que componen el mueble, una serie que los identifique y los pueda articular formalmente. 

La silla tiene una forma y estructuración rígida para dar mayor durabilidad y practicidad a sus usuarios, sin perder la ligereza para su fácil transporte. Resistente a los impactos con un acabado de madera brillante para darle belleza estética, puede ser empleada en interiores como en exteriores.

En el 2012, Arturo Loro participó representando a Perú en el Concurso Diseño Masisa para Estudiantes Latinoamericanos con la Silla K.




viernes, septiembre 26, 2014

Convocatoria Evento de Confrontación. XIX Bienal Panamericana de Arquitectura de Quito 2014.

A lo largo de 35 años, el Evento de Confrontación de la Bienal Panamericana de Arquitectura de Quito ha permitido confrontar más de 5000 obras realizadas en el continente americano, premiando su aporte en la arquitectura, el urbanismo y la teoría arquitectónica. En la última edición del 2012 se recibieron alrededor de 700 proyectos participantes, convirtiéndose en una de las principales bienales de arquitectura en el mundo, no solo por su amplia convocatoria sino y sobre todo por la alta calidad de los proyectos presentados.  Este 2014 la XIX Bienal se realizará del 17 al 21 de noviembre.

El evento de Confrontación opera de manera independiente del evento académico, acción que permite desligar la temática del seminario al proceso de juzgamiento de los trabajos; es decir que, la temática del evento académico no influye en la línea de juzgamiento de los trabajos participantes al concurso.  

Todos los trabajos inscritos y que cumplan con todos los requerimientos exigidos en las bases de confrontación, formarán parte de la muestra cultural que será exhibida durante la semana Bienal y participarán en el proceso de juzgamiento, que deliberará a los proyectos premiados. 

Categorías de Confrontación

A. Diseño Arquitectónico
B. Diseño Urbano y Arquitectura del Paisaje
C. Hábitat Social y Desarrollo (Concurso Mundial)   
D. Rehabilitación y Reciclaje
E. Teoría, Historia y Crítica de la Arquitectura, el Urbanismo y el Paisaje
F. Publicaciones Periódicas Especializadas

El costo de inscripción internacional es de $ 180.00 dólares. La categoría “F” está exenta de los costos de inscripción. El Coordinador Internacional para Perú es el arquitecto Francis Espino Shardin. 

Datos importantes

Evento de Confrontación XIX Bienal Panamericana de Arquitectura de Quito

Fecha límite de recepción de trabajos 
Viernes 17 de octubre del 2014, 18:00 horas (hora de Ecuador)

Inauguración de la exposición
Lunes 17 de noviembre del 2014

Publicación del fallo del Jurado y lectura de veredicto
Del 17 al 21 de noviembre de 2014

Más información

Página web BAQ 2014
Coordinador Internacional Perú, arquitecto Francis Espino Shardin.
Correo electrónico francisespinos@gmail.com

Bases de Confrontación






jueves, agosto 14, 2014

Tercer Lugar. Rodolfo Cortegana Morgan. Concurso de Ideas de Arquitectura para las intervenciones en el Parque Arqueológico Nacional de Machupicchu. Ministerio de Cultura.

El arquitecto Rodolfo Cortegana Morgan obtuvo el Tercer Lugar en el Concurso de Ideas de Arquitectura para las intervenciones en el Parque Arqueológico Nacional de Machupicchu, convocado por el Ministerio de Cultura cuyos resultados se anunciaron el 8 de agosto. Inscrito con el seudónimo de “Umbral”, el proyecto fue realizado por las oficinas Llosa & Cortegana + TARATA + Cotidiano. Participantes: Patricia Llosa, Rodolfo Cortegana, Sebastián Cillóniz, José Luis Villanueva, Elizabeth Añaños, Carlos Tamayo, Juan Villalón, Andrea Silva, Angélica Piazza y Aude Broussé.






Imágenes
Página Facebook Llosa Cortegana Arquitectos

Segundo Lugar. José Canziani Amico. Concurso de Ideas de Arquitectura para las intervenciones en el Parque Arqueológico Nacional de Machupicchu. Ministerio de Cultura.

El arquitecto José Canziani Amico obtuvo el Segundo Lugar en el Concurso de Ideas de Arquitectura para las intervenciones en el Parque Arqueológico Nacional de Machupicchu, convocado por el Ministerio de Cultura cuyos resultados se anunciaron el 8 de agosto. Inscrito con el seudónimo de “Kallanqa”, el proyecto fue realizado por Canziani - Román - Bauer Arquitectos. Equipo: Arq. José Canziani, Arq. José Bauer, Arq. Augusto Román, Arq. Jaime Oteyza, Ronald Armijos y Arturo Cochatoma.








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Canziani - Román - Bauer Arquitectos

domingo, agosto 10, 2014

Propuesta. LLAMA URBAN DESIGN. Mariana Leguía. Gary Leggett. Angus Laurie. Concurso de Ideas de Arquitectura para el Museo Nacional del Perú.

LLAMA URBAN DESIGN, comparte la propuesta que presentó al "Concurso de Ideas de Arquitectura para el Museo Nacional del Perú" convocado por el Ministerio de Cultura. El proyecto ha sido realizado por los arquitectos Mariana Leguía, Gary Leggett y Angus Laurie con el equipo conformado por Genaro Alva, Miguel Linares, Alvaro Rivadeneira y Alexander Wiegering.

Memoria 

¿Cómo diseñar un museo que represente a todo el Perú? ¿Cómo proyectarlo para que no solamente albergue las reliquias de nuestro pasado sino que logre retratar y construir una visión del espacio nacional? ¿Cómo hacer esto sin caer en fórmulas iconográficas o símbolos que puedan allanar la complejidad de nuestra sociedad en aras de una imagen fácil de consumir? 

El reto es significativo, pero es aún mayor cuando suponemos que un museo nacional no sólo debe servir de espacio museográfico o pedagógico sino que debe también construir una esfera pública, una plataforma democrática para el uso de cualquier ciudadano. Lograr esto en un terreno que, para todos los efectos, es suburbano, hace que la tarea sea aún más motivadora. 

Nuestro planteamiento parte de tres decisiones fundamentales: 1) Crear un espacio público protegido de la carretera y el desierto, 2) lograr una monumentalidad horizontal y abstracta, abierta al paisaje en momentos claves, y 3) crear un estructura extensa y flexible, tanto en la planta del museo como en los depósitos y en las zonas administrativas. 

El recorrido de un museo de historia es típicamente lineal o cronológico, formando un circuito continuo, donde la entrada y la salida corresponden a un mismo punto. La comunicación con el exterior es limitada, dándole mayor enfoque al contenido del museo. Nuestra propuesta considera importante mantener este recorrido lineal/cronológico, pero también plantea recorridos alternos o atajos temáticos, para facilitar el acceso directo a ciertas aéreas de la colección. La distribución del museo, además, se divide en cuatro barras separadas con el fin de abrir el circuito estratégicamente a las vistas del paisaje circundante y ofrecer descansos en los intersticios de las barras. 

Si el funcionamiento de un museo puede ser separado entre zonas de exhibición y zonas de soporte, el partido de nuestro edificio propone una división vertical de esta separación. Los programas de soporte (laboratorios, depósitos y administración) se ubican en un gran plinto o basamento de concreto que corre desde el nivel -1.75 al +4.25 m. El museo flota sobre esta base, como una estructura ligera de acero apoyada sobre columnas que lo elevan hasta el nivel +13. 25 m. Es entre estos dos elementos, el plinto y el museo, que se organiza la plaza principal, continuamente activada por los elementos más públicos del programa (biblioteca, talleres, anfiteatros, etc.). 

Es importante recalcar que el acceso principal del visitante está pensado desde la platea principal, a los +10 m, llegando por medio de una gran rampa peatonal o vehicular que desemboca frente a una vista panorámica del complejo arqueológico y el mar. Es desde este nivel que los visitantes descienden a la plaza pública o suben, por medio de una rampa, al nivel del museo. La base de concreto frente a la carretera esta revestida por un sistema cinético de geometría simple (placas metálicas colgadas de 13 x 40 cm) el cual reacciona al movimiento del viento y muestra, a ojo de peatón, una superficie abstracta e icónica.









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sábado, agosto 09, 2014

Primer Lugar. Michelle Llona Ridoutt. Concurso de Ideas de Arquitectura para las intervenciones en el Parque Arqueológico Nacional de Machupicchu. Ministerio de Cultura.

La arquitecta Michelle Llona R. obtuvo el Primer Lugar en el Concurso de Ideas de Arquitectura para las intervenciones en el Parque Arqueológico Nacional de Machupicchu, convocado por el Ministerio de Cultura cuyos resultados se anunciaron el 8 de agosto. Inscrito con el seudónimo de "Triángulo" el proyecto de la arquitecta Llona fue realizado con la colaboración del equipo consultor conformado por los arquitectos Rafael Zamora P., María Alejandra Linares T. y Lucía Weilg L.

Les comparto la memoria e imágenes del proyecto ganador.

Tres techos triangulares

es se asoman entre los árboles y guardan bajo la nave de la estructura de madera, los espacios públicos más importantes del museo de sitio. Bajo el primer techo, el auditorio, la cafetería y la tienda: bajo el segundo techo, la recepción, la boletería y las salas de exposición; el tercer techo, las áreas sociales del área de residencias. Cada techo adquiere su forma en relación a las lluvias y a la dimensión del programa, y su posición en relación al suelo y las preexistencias. 

Los zócalos donde apoyan estos techos contienen los espacios menores en dimensión pero con igual intensidad de uso que los públicos. Entre muros gruesos se protege a los que estudian y sirven al lugar. En el primer zócalo, la administración, los talleres de investigación, los depósitos de piezas y los servicios para el personal de trabajo; en el segundo zócalo, las habitaciones y los servicios comunes.

La ruta de ascenso a Machupicchu aparece en el primer instante, desde el cruce del río Vilcanota, para recibir y marcar el acceso a las ruinas. Este es el recorrido corto e introductorio al parque arqueológico; es una secuencia de situaciones espaciales interiores y exteriores, que vincula arquitectura y paisaje: acompaña la caminata hasta pasar en puente sobre la plaza principal, es recibido bajo uno de los techos triangulares, acogido en la boletería, conducido por la doble altura de las salas de exposición, continuando por una pasarela al aire libre, entre los arboles con vista al rio Vilcanota y en balcón sobre el orquideario, para finalmente dejar al turista en la plaza de subida donde nuevamente puede tomar el bus. En este punto parte también la ruta alternativa peatonal hasta las ruinas.

El suelo se redibuja optimizando los niveles existentes para distribuir tres plataformas lisas que enmarcan y acompañan los restos arqueológicos. El primer suelo establece la ruta de los vehículos, apartando las vías de las ruinas y delimitando el espacio para los tres techos que componen el conjunto. El segundo suelo es amplio y crea la plaza principal que acompaña y articula los andenes existentes habilitando una horizontal pública, y articula los volúmenes del área de recreación y el área de exposición del museo de sitio. El tercer suelo crea un piso nuevo sobre el andén más alto y más privado, donde se dispondrán las residencias y espacio para los trabajadores del parque arqueológico.

La pre-existencia es el paisaje, y solo éste se conserva, como escenografía geográfica e histórica y cultural. Los tres techos, los zócalos, la ruta y el suelo, acompañan y dejan espacio para que la pendiente, el río, los árboles y los restos arqueológicos sean parte del nuevo museo de sitio.






Vista de conjunto desde la entrada

Ingreso a Machupicchu

Boletería

Puente de Interpretación

Vista de conjunto desde el río

Vista de la Plaza Principal

Vista de la Plaza Principal y conjunto

Sala de Exposición

Tienda y Cafetería

Auditorio

Imágenes
Gracias a la arquitecta Michelle Llona por la amabilidad de hacernos llegar las imágenes del proyecto para publicarlas en la página Facebook de la Bitácora a las pocas horas de haberse dado los resultados del concurso. Pueden ver el álbum en Facebook aquí.
Página web LLONAZAMORA